viernes, 30 de noviembre de 2012

Todo tiene un principio

¡¡Hoy toca receta!!
Sí, hoy es un buen día para mi primera receta. Cuc&Cake ya está en marcha y me hace mucha ilusión presentarlo a todos ( y también un poco de vergüenza...)

Estoy muy contenta e impaciente por que llegue el sábado. Este sábado hago mi primer curso de cupcakes decorados: flores y Navidad. De momento, todas las recetas que voy haciendo las aprendo de los libros de cocina que tengo en casa,  de los blogs que leo y de los vídeos de Internet. Probando es como más se aprende, ¡y se engorda también! ¡Prometo subiros las fotos de mis cupcakes de Navidad!

Vamos con la receta. Esta tarta es de hace un año, pero he querido subirla porque fueron mis inicios con la repostería creativa. La primera tarta que hice en fondant fue para el cumple de mi hermano y de mi suegro. Qué suerte que los dos nacieran en dos días correlativos, especialmente porque es el 31 de diciembre y el 1 de enero. ¡Guau! ¡Dos pasteles en uno! Fin de año, en casa toda la familia...pues se me ocurre sorprenderlos con una tarta de cumpleaños especial....todo empieza aquí...




La receta fue la del bizcocho de yogurt y limón de toda la vida:

- 1 yogurt de limón
- la ralladura de un limón
- 1 vaso de yogurt de aceite de oliva suave
- 2 vasos de yogurt de azúcar
- 3 vasos de yogurt de harina
- 3 huevos a temperatura ambiente
- 1 sobre de levadura tipo Royal

Es la receta más fácil que he hecho y me trae buenos recuerdos. ( y sin tener que liarme a pesarlo) Eso sí, con batidora de varillas eléctrica, ahí, desafiando a mi madre y mi pobre muñeca!!

Lo primero de todo siempre: precalentamos el horno mientras hacemos la masa, a 170º.

En un cuenco batimos el azúcar con las yemas hasta que forme una crema.
Añadimos la harina con la levadura tamizada a la mezcla y batimos. Una vez integrado añadimos el yogurt de limón, la ralladura y el aceite. Mezclamos.
Batimos las claras a punto de nieve y añadimos a la masa.
Movemos sin batir para que no se baje la mezcla y quede esponjosa con movimientos envolventes.
Untamos un molde con un poco de mantequilla y harina para que no se pegue y vertemos la masa en el molde repartiendo bien. Golpeamos un poquito en la mesa y metemos al horno a media altura.
En mi caso, con 35 minutos a 170º es suficiente, pero eso depende de vuestro horno ( pinchamos con un palillo hasta que salga limpio).

Una vez fuera del horno, lo dejamos cinco minutos en el molde y luego desmoldamos y dejamos enfriar.

Una vez frío, cortamos por la mitad con cuidado para rellenar. En mi caso le puse Nutella pero podéis poner lo que queráis, mermelada de naranja, de melocotón, ganache de chocolate... las combinaciones son infinitas, ¡¡lo que más os guste!!

¡¡Y a decorar!! Yo estuve como cinco horas, amasando fondant, mirando fotos, vídeos, y para ser la primera, ¡¡estuve muy orgullosa!! tiene sus fallos, que poco a poco he ido mejorando pero eso sí, os puedo asegurar que gustó, y mucho. No quedó ni un trozo!! Ñam! (sólo se salvó Papa Noel)


Espero que os guste la receta y os animéis a hacerla que ya queda poco para las Navidades. ¡Contadme que tal vuestras tartas!


¡¡Besitos a tod@s!!


domingo, 25 de noviembre de 2012

La presentación oficial


Llevo mucho tiempo con este proyecto en mente pero nunca he tenido tiempo ni coraje como para empezar con él. Tenía muchas ganas de comenzarlo para ir contando poco a poco mis experiencias culinarias. Sí. Este blog tratará de cocina. Lo tengo claro. Más que de cocina, de repostería, que es lo que me apasiona. Podría pasar horas y horas en la cocina sin darme ni cuenta de la hora ni del día en el que vivo soñando con los postres con los que pueda hacer sonreír a un amigo, a un familiar o simplemente a mí misma.

Siempre me ha gustado cocinar, de pequeñita pasaba horas mirando como mi madre, buena cocinera como todas las madres del mundo, cocinaba los domingos un pollo asado, un buen arroz con caldo, unos canelones con bechamel...Qué recuerdos.

Pero lo que más me gustaba era cuando hacíamos bizcocho de yogurt y limón. Recuerdo que siempre me tocaba batir las claras a punto de nieve a mano. Sí, a mano. Antes mi madre no tenía batidora de varillas eléctrica ni robots como los que hay ahora y me tocaba batir a mano (aunque al final acababa ayudándome ella). Recuerdo que me pasaba el tiempo en la cocina mirando cómo subía la masa del bizcocho en el horno. El olor a limón y a bizcocho horneado que embriagaba toda la cocina es uno de los mejores olores que recuerdo de mi infancia. Aquellas tardes de invierno de fin de semana haciendo bizcochos, churros con chocolate o esos creps con Nocilla que tanto añoro.

En casa somos tres. Mi pareja y yo, y nuestra perrita Maggie. A los tres nos gusta comer.
Mi pareja y yo somos de meternos en la cocina y hacer desde una simple sopa hasta un rissotto.Yo soy más de postres, pero he de decir que la cocina no se me da nada mal.

Creo que este blog tenía que tener un nombre relacionado con nosotros, Cuc&Cake. Cuc es el nombre cariñoso que le damos a Maggie, galga española que adoptamos hace ya casi siete años en Sos Galgos. Cuc en catalán se refiere a gusano, cariñosamente, porque cuando duerme ( las casi 24 horas del día) se acurruca haciendo una bola y parece que ese caballito grande que corre y salta como loca se hace pequeña como un gatito. Y como nos encantan los cupcakes, Cuc&Cake era el nombre más acertado.

Y hasta aquí un poco de mí, poco a poco os iré contando más cosas y mostrando mis dulces creaciones, las buenas y las malas, y espero ir aprendiendo y que me enseñéis vosotros también, con vuestros comentarios, vuestras sugerencias, vuestras peticiones.

¡Un besito a tod@s!